NACIMIENTO, PERSONALIDAD Y RELACIONES. Taller de Rebirthing Convergente.



Esto es el nacimiento. La tortura de un inocente.Qué banalidad creer que tal gran cataclismo no dejará huella.Sus marcas están en todos sitios : en la piel, en los huesos, en el estómago, en la espalda.
En todo nuestro disparate humano. En nuestras locuras, nuestras torturas, nuestras prisiones.En leyendas, épicas, mitos. En las Escrituras.Dr. Frederick Leboyer (Birth without violence, p.30, 1975)



Nacimiento, Personalidad y Relaciones
El nacimiento es nuestra primera introducción al mundo y, según cómo hayamos sido tratados en este primer momento de gran transición y de primer impacto en nuestra vida, de la misma manera recrearemos las situaciones futuras y de mayor transición que viviremos en la edad adulta.
Según como haya sido nuestro nacimiento, así será nuestra vida.
Un bebé que haya sufrido mucho en su nacimiento podrá interpretar que para poder vivir hay que luchar ya que en el momento de su nacimiento y de primer contacto con la vida, es lo que tuvo que hacer para poder nacer.
Una persona cuya madre haya sufrido mucho en el parto, puede haber nacido con el pensamiento de ‘Soy culpable’ o ‘mi presencia hace daño a los demás’ con lo que a lo largo de su vida, atraerá situaciones que le recalquen esa creencia que, en este caso es que ‘soy culpable’ y ‘mi presencia hace daño a los demás’.
Es importante conocer nuestro nacimiento y cómo éste está pudiendo sabotear nuestra vida ya que al ponerle luz, aceptarlo y trascenderlo podrás liberarte de muchos condicionamientos internos que te bloquean y vivir, por fin, la vida que te mereces vivir por derecho divino.
Se considera trauma de nacimiento a los acontecimientos sufridos en el periodo comprendido por la concepción (el proceso por el cual el esperma y óvulo se unen para formar un embrión), la vida intrauterina (los 9 meses dentro del vientre materno) y el nacimiento (parto). A esta perspectiva, se le suma la que aporta el concepto de Proyecto Sentido Gestacional, presentada por Marc Frechet, Psicólogo clínico, inspirado en trabajos de Anne Shütsemberger donde amplía el período de influencia. ( ( •A Nivel cuantitativo: período temporal, comienza en el momento en que uno de los padres o los dos, emite el deseo de tener un hijo. Se desarrolla durante todo el embarazo y después del parto, se termina aproximadamente al año de edad. (9-9-9) o a los 3 años según algunos autores , donde consideran la formación neurofisiológica del bebé que es hasta los tres años aprox.; hasta entonces el yo del niño es igual al yo de la mamá (están fusionados psíquica y emocionalmente).•A Nivel calificativo, el hijo que nacerá, este ser imaginario en un comienzo, en proyecto, en desarrollo y en fabricación en el útero materno durante la gestación sufre la influencia de su entorno.))
El feto crece rápidamente, recibe información a través del sistema nervioso de la madre y psíquicamente interpreta sensaciones y reacciona.
Repetimos la felicidad del útero cuando nos metemos en la cama tapados y a oscuras; en la bañera, con agua caliente; cuando pasamos un tiempo en el auto, etc. Estas circunstancias son para nosotros intentos de recuperar la sensación de cómodo encierro y de seguridad en la vida intrauterina.
Los nueve meses en el útero podrían afectar al feto en las conclusiones sacadas en base a estas experiencias de vida intrauterina.
El tiempo ideal en el útero pasa rápidamente. El cuerpo del feto crece y crece, y el espacio dentro del vientre es muy pequeño para contener tanta vitalidad. El pequeño busca una salida en la oscuridad, hasta ver una luz brillante al final de un túnel. Con las contracciones del útero comienza el viaje hacia la nueva vida.
Lo que llamamos parto normal o natural incluye algunas o todas las siguientes situaciones:
• Médicos y enfermeras preparados para una emergencia en un ámbito hospitalario.
• Mucho ruido, provocado por los instrumentos utilizados, en lugar de los suaves sonidos del útero.
• Inducción para ayudar al desarrollo del proceso.
• Aplicación de anestesia para calmar el dolor de la madre.
• Luz brillante, después de mucho tiempo en la oscuridad.
• Cambio de temperatura: de la calidez del útero al frío de la sala de parto
También, el nacimiento es la primera experiencia social y tiene un gran impacto sobre la calidad de nuestra vida con relación a los cambios.
Hay que considerar los efectos de, por ejemplo, el hecho de que el bebé sea separado inmediatamente de la madre para chequeos médicos muchas veces innecesarios (peso, medidas y baño) y luego ser puesto en un cunero, solo.
Como consecuencia de estos acontecimientos, el recién nacido saca conclusiones acerca de la vida y de las personas, que pueden ser negativas como: “Vivir es peligroso”, “el placer conduce al dolor”, “las personas me persiguen”, “cuando te brindan apoyo te controlan y manipulan”, “nadie me quiere”, “estoy solo”, etc.
Estos pensamientos son los ingredientes del libreto de nacimiento que luego proyectamos inconscientemente en nuestra vida y en las relaciones que creamos.
La forma en que mantenemos estas emociones lejos de la conciencia es a través de una respiración superficial, empleando entre un cuarto y un tercio de nuestra capacidad respiratoria; respirar superficialmente se ha convertido en algo normal.
Rebirthing nos permite entrar en contacto con el placer primario burdamente interrumpido en nuestro nacimiento.
Permite aprender que el amor y el apoyo pueden ser, nuevamente algo confiable y seguro. Cuando inhalamos conectamos con la masa mental negativa y soltamos en la exhalación estos pensamientos que están en la memoria de las células y producen efectos tales como estrés, tensión, lucha, enfermedades, dolor, etc.
En el talleres veremos los tipos de nacimiento, las conclusiones que pudimos haber obtenido de ello y cómo liberar esas memorias dolorosas que nos condicionan aún hoy en día.
A través de respiraciones conscientes y desde la perspectiva de la Lógica Global Convergente.
Textos extraídos de la siguiente bibliografía.
Rebirthing, el arte de Renacer a la vida, Claudia Dorda. Ed Kier
Principios de Psicosomática Clínica, Dr Salomon Sellam, Ed Bérangel.

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